Protocolo 

de trabajo

El equipo humano de Perros de Alerta está formado por profesionales del mundo del adiestramiento canino y de la Psicopedagogía. 

Contamos con un equipo entregado a dar respuestas personalizadas a las necesidades de cada familia. El acompañamiento y apoyo a nuestros usuarios es una de las piezas clave del protocolo de trabajo, siempre de la mano de profesionales cada vez más especializados y en continua formación y actualización. 

Los perros de alerta trabajan realizando una acción combinada: detección a través de su olfato y emisión de la señal de aviso. Esto permite a su usuario tomar medidas antes de que se presente una situación de riesgo.

La diabetes y la epilepsia son enfermedades crónicas que requieren mucha constancia por parte de quien las padece y sus familiares. En ambos casos, el descanso por las noches se ve afectado, debido a que el miedo a que se produzca una situación complicada sin que nos demos cuenta implica un sueño intermitente cada noche. Del mismo modo, se ven comprometidas algunas actividades de la vida cotidiana.

En Perros de Alerta hemos desarrollado un protocolo de trabajo que nos permite entregar perros seleccionados, educados y adiestrados para alertar con antelación de las subidas y bajadas de glucosa (diabetes) y crisis de desconexión sensorial (epilepsia), con el fin de dar respuesta a las dificultades de quien con estas patologías. Este protocolo cuenta con varios pasos:

SOCIALIZACIÓN

Contamos con la colaboración de familias de acogida que se encargan de cuidar al cachorro durante su periodo de formación, de reforzar su educación y de traerlo cada día a trabajar

EDUCACIÓN

Trabajamos siempre en positivo. Enseñamos al cachorro a detectar el olor específico que se desprende antes de una subida, bajada de azúcar o crisis de epilepsia y le enseñamos a avisar a través del ladrido.

CURSO DE ENTREGA

Formamos a la familia usuaria para que conozcan los hábitos diarios que han de aplicar para que el perro de alerta médica mantenga todo lo aprendido a lo largo de toda su vida.

ACOMPAÑAMIENTO

Quedamos siempre disponibles para resolver las dudas de convivencia que surjan en el día a día con el perro de alerta médica.

Las videoconferencias nos permiten estar cerca de todos nuestros usuarios, sea cual sea su lugar de residencia.

Trabajo de detección

Esta parte del protocolo cuenta con dos fases diferenciadas:

En la primera trabajan en un laboratorio donde aprenden a  identificar el isopreno y realizan trabajos de discriminación olfativa. 

En la segunda fase pasan a los entornos simulados, donde los perros aprenden a generalizar el trabajo que han aprendido a realizar en el laboratorio en entornos de la vida cotidiana. De esta forma, aprenden a emitir avisos en situaciones como la noche, mientras comes o durante un café en un bar.

Familias de tutela

Durante los meses de formación, el perro siempre viven en una familia. Ya sea en casa de su propia familia, porque viven cerca de la sede de CANEM en la que está siendo preparado o en casa de una familia de acogida.

Las familias de acogida son familias que viven cerca de alguna de nuestras sedes y acogen en su hogar al cachorro en formación para favorecer su educación y socialización. Cada día laborable traen al cachorro al centro para que realice sus sesiones de entrenamiento y después vienen a recogerlo

Las familias de acogida permiten a Perros de Alerta preparar cada uno de los perros y entregarlos a familias que viven en cualquier parte del mundo.

Si vives cerca de cualquiera de nuestras sedes: Zaragoza o Mataró y quieres ser familia de acogida ¡Escríbenos!

Concierta una videollamada gratuita para más Información

Estamos aquí para responder a todas tus preguntas y explicarte cómo podemos ayudarte. 

Sabemos que una decisión tan importante como incluir un perro de alerta médica en la familia tiene muchos factores a tener en cuenta.


Si no tienes claro que un perro de alerta médica pueda ayudarte en tu caso concreto, ¡no te quedes con las dudas! 


Nosotros te ayudamos a valorar tus necesidades